Bodegas Baigorri: Baigorri de Garage 2008 con Jamón Ibérico de Bellota
BAIGORRI DE GARAGE 2008
Julio de 2013
Bodega
Denominación de Origen
Rioja
Tipo
Vino Tinto Reserva
Varietales
100% tempranillo
Añada
2008
Elaboración y crianza
Vino tinto elaborado con viñas muy viejas de escasa producción. Uvas de la variedad Tempranillo seleccionadas a mano, grano a grano, utilizando mesas de selección y vibración. Largas maceraciones y fermentaciones en tinos de madera. Fermentación maloláctica, junto con sus lías en barricas nuevas de roble francés. Un panel de cata decide el tiempo que este vino permanece en la barrica (mínimo 18 meses).
Grado Alcohólico
14,5%
Maridaje Recomendado por la Bodega
Para acompañar cualquier plato especialmente postres. También verduras a la plancha, cocidos, carnes y platos de alta restauración.
Precio aproximado
37€
Nota de cata de Nos Gusta el Vino
Color: Cereza picota capa alta.
Nariz: Fruta roja y negra en compota (ciruelas, moras), balsámicos, notas de la madera como el cacao y la pimienta, alcohólico.
Boca: Cálido, equilibrado, buena acidez, expresivo, intenso, potente, largo, persistente, balsámico, alcohólico. Recuerdos a mermelada de tomate, fruta negra en compota, regaliz y a madera (cacao, pimienta, vainilla).
Comentario de Nos Gusta el Vino
Un vino excelente, se nota que ha estado mimado y cuidado des de el primer momento, y donde el único pero que le puedo dar es su precio, que no está al alcance de todos los bolsillos pero lo vale, es un vino de guarda si podéis permitiros el lujo de no caer en la tentación de bebéroslo ya mismo. Nosotros lo hemos maridado con Jamón Ibérico de Bellota, que combina a la perfección, aunque es un vino que marida con casi cualquier plato potente o incluso sólo.
BODEGAS BAIGORRI (www.bodegasbaigorri.com)
Bodegas Baigorri, la unión del vino y la arquitectura
Ubicada en la localidad alavesa de Samaniego, Bodegas Baigorri ha sido proyectada por el arquitecto guipuzcoano Iñaki Aspiazu Iza, colaborando estrechamente con su promotor Jesús Baigorri, posteriormente en el año 2007 es comprada por Pedro Martínez Hernández, quien impulsa de forma determinante el Proyecto.
En el desarrollo del Proyecto se han cuestionado todos los pasos que conforman el proceso de elaboración y a cada uno de ellos se ha dado respuesta arquitectónica, evitando la utilización de medios mecánicos que pudieran dañar la uva, optimizando todas las fases del proceso. Por esto, podemos decir que este proyecto enológico es el único en el mundo donde la arquitectura tiene un protagonismo relevante en el proceso de elaboración del vino, diferenciándose claramente de los proyectos realizados por grandes arquitectos, donde su intervención queda supeditada fundamentalmente a la parte estética.
La Bodega está formada por una caja de cristal vacía, de 400 metros cuadrados, que acogerá al visitante desde la cual tenemos una visión privilegiada de la Sierra de Cantabria, del pueblo de Samaniego y de las extensiones de viñedo que alcanzan el Río Ebro. Descendiendo, y ya bajo tierra, el programa de bodega se organiza de forma funcional en distintos niveles (8 plantas con una altura total de 32 m.), presentando un recorrido de carácter didáctico y explicativo en lo que se refiere al proceso de elaboración del vino.
Empezamos con el nivel de recepción de uva con las mesas de selección y vibración, continuando con los niveles donde se ubican los depósitos de maceración para terminar en una gran sala de barricas aislada del resto y sometida en todo momento a condiciones especiales de temperatura y humedad para la conservación de los vinos. Un espacio abovedado constituye la Sede Social que permite la vista simultánea de la nave de barricas y de nuestros viñedos.
La integración de la arquitectura en el paisaje es un punto clave del proyecto desarrollándose la edificación bajo el terreno, adoptando la arquitectura una posición sumisa y de respeto al medio donde se enclava.
La bodega elabora uva que compra a agricultores de la zona. El primer año que la bodega elaboró fue el 2002. Desde entonces y cada vendimia, los técnicos de laboratorio junto a su enólogo Simón Arina establecen unos parámetros de calidad que son los que van a determinar el precio que se pagará al agricultor por la uva.
Durante todo el año desde bodega se siguen todas las labores que los agricultores hacen en sus viñedos, asesorándoles con los tratamientos y abonos. Cuando llega la vendimia, desde bodega se establecen tres niveles de calidad de la uva y son éstos los que tendrán como destino las diferentes categorías de vinos.
Las singulares características de cómo discurre la vendimia y los diferentes pasos que se siguen en el proceso de elaboración nos van a marcar de forma especial nuestros vinos.
Toda la uva que llega a bodega viene en pequeñas cajas de 12 kilogramos y antes de pasar a las mesas de selección se atempera en habitaciones especiales climatizadas para unificar las temperaturas de la uva recolectada.
Es una bodega donde no existe tolva de recepción y toda la uva es seleccionada a mano por personal especializado utilizando mesas de selección y, posterior al despalillado, mesas de vibración donde se retiran de los granos uno a uno todas las materias herbáceas como son los peciolos y pequeños trozos herbáceos de hojas y raspón.
No se utilizan bombas ni para el traslado de la uva, ni para el remontado de los depósitos. No existen bombas. Todos los movimientos de uva o de vino se realizan por gravedad. Ayudados de unos depósitos de 2.000 litros que se elevan y trasladan de un lugar a otro utilizando un sistema de puentes grúa o polipastos.
Los depósitos de maceración se han fabricado en colaboración con un equipo de ingenieros italianos que nos va a permitir elaborar siguiendo unos especiales métodos de trabajo.
La utilización de unos habitáculos, también llamados cuartos de la maloláctica, con temperaturas especiales permite que las levaduras trabajen de manera óptima en la fase de la fermentación maloláctica.
Todas las zonas de la bodega están climatizadas con control de temperatura y grado de humedad.
Sistema especial para la extracción de anhídrido carbónico.
Desde la primera elaboración realizada en el año 2002 nos ha servido para corroborar y confirmar que estamos en el buen camino y que todos los medios que se han puesto al servicio del proceso productivo nos van a dar, en un tiempo corto, los resultados esperados.
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